Gato y Perro Viviendo Juntos
Una relación
conflictiva
Los gatos y los perros son famosos
por sus relaciones conflictivas y hay algunas razones para ello. Debido
al hecho de que pertenecen a diferentes especies, sus códigos
y lenguaje corporal no es el mismo y esto los hace malinterpretar
al otro y entonces los conflictos aparecen.
Hay varias formas en las que gatos
y perros se expresan y se comunican a través de sus códigos
y lenguaje corporal de forma diferente el uno del otro. La mayoría
de las veces, los perros levantan su pata deseando jugar, mientras
los gatos la levantan de forma defensiva y buscando golpear al otro,
y por lo tanto un perro puede malinterpretar este signo e intentar
jugar con el gato cuando este en realidad lo lastimaría. Otro
claro ejemplo de la diferencia entre los códigos de perros
y gatos esta en la forma en que los gatos mueven sus colas cuando
están enojados mientras los perros las mueven cuando están
contento o deseando jugar, convirtiéndose en una malentendido
importante entre ellos.
Acostumbrarse el uno
al otro
A pesar del hecho de que gatos y perros
muestran señales, códigos y lenguaje corporal muy diferentes,
pueden aprender a comprenderse y vivir juntos sin grandes problemas.
Esto debe ser logrado de a poco y con cuidado, preferentemente siguiendo
el consejo de un profesional, dado que una pelea entre un gato y un
perro podría causar una situación peligrosa.
Enemigos que se convierten
en amigos
Gatos y perros pueden, de hecho, convertirse en buenos amigos si
reconocen el lugar que el otro ocupa en la familia. Una vez que se
acostumbran el uno al otro y las posiciones están claras, un
gato y un perro pueden hasta jugar juntos y convertirse en buenos
amigos. Una vez que el perro reconoce al gato como parte de la familia
o parte de la manada, el respetará el hecho de que vive bajo
el mismo techo, y aun cuando no se convierta en su amigo, ellos podrían
vivir juntos sin problemas mayores. Esto no siempre ocurre, y a veces,
dependiendo en la personalidad del gato y la del perro, un gato y
un perro podrían encontrar imposible el vivir juntos, y por
lo tanto es muy importante ser muy cuidadoso a la hora de presentar
una mascota nueva a la residente.